Esta semana, se llevó a cabo una reunión entre funcionarios de la Secretaría de Trabajo y representantes de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) y la Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN) en el marco de las negociaciones paritarias. La reunión surgió después de que el Poder Ejecutivo decidiera no renovar 7,000 contratos de trabajadores de la administración pública.
En noviembre, los gremios estatales habían acordado con el Gobierno un aumento del 10% para noviembre y el 9% en diciembre. Sin embargo, aún no hay un acuerdo sobre cómo evolucionarán los salarios en enero y los primeros meses de 2024.
La secretaria general adjunta de ATE, María Mercedes Cabezas, consideró que la convocatoria a la reunión fue una provocación, ya que coincidió con una movilización a Tribunales convocada por la CGT y otras organizaciones sociales y políticas. Cabezas expresó su descontento en las redes sociales, mencionando que fueron convocados a las paritarias sin una propuesta y que esto se produjo el mismo día que llamaron a movilizar, mientras los salarios están congelados y el presupuesto aprobado permanece sin cambios, a pesar del aumento de los precios.
En una entrevista previa a la reunión, el presidente Javier Milei afirmó que no habrá aumento para los trabajadores estatales.