Dicha expresión artística está inspirada en la aplicación snapchat, que permite a sus usuarios utilizar la modalidad de caras animadas. De esa manera, se pueden apreciar distintas figuras de mosaicos, en cuyo centro se colocaron espejos para que los vecinos puedan verse reflejados en esas decoraciones. La obra tiene una medida de 3.20 x 1.80.
Por su parte, Kuhn señaló: «Finalmente llegó el día y hemos plasmado en el Hospital de Pilar esta obra para enfatizar la importancia de la donación. La idea es que este mural sea interactivo con la gente. Por eso cada una de las caritas cuenta con espejos para que las personas se vean reflejadas como donantes tanto en su posible rol de receptor como de dador. Por eso diseñamos un cartel que dice: mirá qué lindo te queda ser donante».
Cabe señalar que la autora de la iniciativa es quien también impulsó el mural en homenaje al médico René Favaloro, obra emplazada en el Tanque de Agua por un grupo de vecinos que se sumó a una movida internacional para homenajear a Favaloro, colocando corazones elaborados con mosaicos, acción que se replicó en 130 puntos del país, como así también en Brasil y Uruguay.