Amenazas de violación y muerte fueron algunos de los improperios que soportan Cristóbal Sebastián Castillo Suárez y Nancy Fernández padres de dos mujeres menores de edad y un bebé que conforman el núcleo familiar.
Según Fernández y como ya publicamos con anterioridad, el malestar comenzó luego de que Nancy se negara a declarar en favor de unos de los hermanos Lezcano, quien, según el relato de su vecina, habría golpeado a su esposa fuertemente y en varias oportunidades. La negativa de dicho pedido generó rispideces hasta el punto culmine en el que la familia Suárez teme por la integridad física y psicológica de sus integrantes.
“Volví a hacer la denuncia, porque hay una persona que no para de insultarme y amenazarme cada vez que salgo a mi patio o a la vereda”, comentaba Fernández.
La vivienda familiar se ubica en la calle Chubut esquina Pinto, del barrio Monterrey de Presidente Derqui, el fiscal a cargo de la causa es Andrés Quintana quien envío a peritos a tomar fotos y verificar las condiciones en que se encuentra la medianera.
Otros de los motivos que resultaron conflictivos fue el hecho de revocar una pared que está justamente en el límite de cada lote, por ello el pedido de fiscalía por verificar dicha medianera.
“Desde la fiscalía hoy vinieron a sacar fotos, para cerciorarse si la pared que yo levanté estaba sobre su paredón y pudieron constatar que esto no era cierto”, declaraba Nancy.
Violencia
“Yo no puedo dejar pasar esta situación de violencia. Les pedí por favor que dejen de tirar en mí techo y en mí media sombra cascotes, botellas, hierros, porque están mis hijos y pueden matarlos si les cae algo de eso en la cabeza”, detallaba Nancy Fernández y agregaba: “Todo el mundo le tiene miedo a la familia Lezcano, pero yo no. Voy a defender a mi familia con uñas y dientes”.
Nancy acusó directamente a la familia Lezcano como los responsables de impartir el temor en el barrio, de amenazarla de muerte y de atemorizarla con que le iban a violar a una de sus hijas: “Los que me atacaron fueron Sergio Javier Lezcano, Cristián Lezcano y Adolfo Lezcano que fueron detenidos. Estuve 8 horas en la comisaría y ellos estaban en la cocina tomando mate”.
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En las siguientes imágenes se puede observar la desobediencia ante el intento de dialogo de parte de los efectivos policiales, también se escucha la detonación de un disparo en el momento de máxima tensión en el que las corridas y empujones atemorizan a los vecinos de Monterrey.
