El desembolso representa el 40% de un fondo total de $71.500 millones destinado a financiar la adquisición de patrulleros, equipamiento y obras de infraestructura vinculadas a la prevención del delito, en el marco del Plan Integral de Seguridad Bonaerense, cuya inversión total asciende a $170.000 millones.
Desde la gobernación destacaron que la medida responde a una necesidad concreta de reforzar la seguridad local en un contexto de creciente demanda ciudadana y con un Estado nacional que ha recortado herramientas clave para los distritos. Según detalló Kicillof, la Nación eliminó recientemente un fondo de $750.000 millones que debía ser destinado a mejoras en las condiciones de las fuerzas policiales y la seguridad ciudadana.
“Frente al retiro del Estado nacional, nosotros tomamos decisiones. No vamos a dejar a los municipios solos. Esta inversión es una muestra de gestión responsable, federalismo real y compromiso con la seguridad de las y los bonaerenses”, sostuvo el gobernador en un comunicado oficial.
El fondo fue presentado en marzo durante un acto en Berazategui ante más de 100 jefes comunales, de los cuales 58 ya firmaron su adhesión formal al decreto N°371/2025. Entre los distritos que recibirán esta primera cuota se encuentran municipios clave del conurbano y del interior, como La Matanza, Avellaneda, Bahía Blanca, Mar del Plata, Lomas de Zamora, Pilar, Tres de Febrero y Tigre, entre otros.
La implementación de este fondo no solo refuerza la seguridad sino que también implica una importante inyección de recursos para dinamizar economías locales y fortalecer capacidades operativas a nivel municipal.
Una política de seguridad con visión ejecutiva
Desde una óptica de liderazgo institucional, Kicillof se posiciona como un gobernador que responde con hechos ante la crisis de financiamiento. Esta política pública muestra una lectura clara del contexto y una ejecución que prioriza resultados: anticiparse a los efectos del ajuste nacional, preservar la gobernabilidad territorial y responder a las urgencias ciudadanas sin demoras burocráticas.
En tiempos de restricciones presupuestarias y tensiones federales, la Provincia apuesta a su autonomía operativa, profundizando una estrategia que combina inversión estatal, coordinación local y foco en la gestión eficiente de los recursos públicos.
