En una entrevista, al borde de las lágrimas Amílcar, colaborador del Hogar San Cayetano comenta que tras 20 años de existencia, el Hogar cerrara definitivamente sus puertas.
“Lamentablemente la noticia es real” comenzó diciendo Amílcar Antognoni, notablemente conmovido. Lo cierto es que tras años de lucha y con deudas que venían arrastrándose desde el 2012, la institución no podrá afrontar un año más.
“Ya era un acto de irresponsabilidad seguir adelante”- afirmo el colaborador, y es que con mucho esfuerzo habían encarado los últimos años de funcionamiento; pero el aumento de tarifas de los dos últimos años, sumado las cargas sociales, los incrementos en sueldos de profesionales y la baja de donaciones hizo que el Hogar deje de cubrir vacantes, hasta el punto de quedar con un solo chico. El cuál será el último, ya que luego de su traslado, la institución que recibía niños de familias judicializadas y que había logrado la adopción de varios de ellos, tendrá que cerrar sus puertas.
Por último, Amílcar se refirió a los entredichos con el municipio. Aseguro que el cierre no se debe a un abandono por parte del mismo y afirmo que este; “colabora con muchos merenderos y tiene un millón de cosas que ocuparse”. Contó que todos los niños fueron debidamente ubicados y que es una verdadera tristeza haber llegado a esta situación.
Redacción: Germán Reyes.