El anuncio fue realizado este lunes por el ministro de Gobierno bonaerense, Carlos Bianco, durante su habitual conferencia de prensa. Allí aclaró que los sectores de menores ingresos continuarán recibiendo subsidios y remarcó que, para acceder a la tarifa social, será obligatorio inscribirse en el padrón correspondiente, tanto para solicitar el beneficio como para conservarlo en caso de quienes ya lo perciben.
Según precisaron desde el Ejecutivo provincial, la quita de subsidios alcanzará a unos 79.500 usuarios: 66.900 correspondientes a viviendas ubicadas en el Gran Buenos Aires y otros 12.600 en el interior de la provincia. La iniciativa busca optimizar los criterios de inclusión y exclusión dentro del sistema de subsidios energéticos, adecuándolos a la realidad socioeconómica de los hogares.
Hasta el momento, el esquema de segmentación contemplaba tres grupos: usuarios de altos ingresos, con percepciones superiores a 3,5 canastas básicas y sin subsidios; sectores de bajos ingresos, por debajo de una canasta básica total, que recibían ayudas de hasta el 65% del consumo mensual; y hogares de ingresos medios, con percepciones de entre una y 3,5 canastas básicas, que contaban con subsidios parciales.
Con la nueva modalidad, la segmentación se reducirá a dos categorías. Por un lado, los “hogares con subsidio”, que incluirán a viviendas con ingresos inferiores a tres canastas básicas y recibirán asistencia diferenciada según la época del año. Por otro, los “hogares sin subsidio”, integrados por aquellos con ingresos superiores, que dejarán de recibir ayuda estatal en sus facturas de energía.





